Ernestina Godoy, legisladora local por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), se manifestó a favor de realizar cambios geopolíticos en la delegación Iztapalapa para dividirla en cuatro demarcaciones y en pro de los cambios que conviene la Reforma Política del Distrito Federal impulsada por el Gobierno local; mientras, por el contrario, en contra de la actual Reforma Energética del Gobierno Federal.

Durante su informe de labores legislativas en el Teatro de la Ciudad, la perredista se manifestó a favor de que demarcaciones tan grandes como lo es Iztapalapa, al poniente de la ciudad, se dividan en cuatro regiones con independencia política cada una, cual nuevas delegaciones. Esto, dijo, evitaría graves problemas en cuanto a la carga administrativa necesaria para gobernar tales territorios con las condiciones actuales de derechos y obligaciones de los que gozan y/o padecen los jefes delegacionales.

Un problema recurrente, sino es que hasta histórico en dicha zona de la Ciudad de México, es el del abastecimiento del agua, por lo que resulta un argumento más en el mismo tenor a favor de la división de la demarcación, propuesta incluida en la Reforma Política del Distrito Federal que impulsa el mandatario local, Miguel Ángel Mancera.

En ese respecto, aprovechó para citar los escándalos de corrupción que se han cernido sobre los legisladores locales por el uso del Presupuesto Participativo, del cual muy pocos han rendido cuentas. Por eso, manifestó, “se deben entregar esos recursos a la gente para evitar obras con mayor costo”, refiriéndose al gasto ejercido no precisamente con perspectivas de carácter social.

Refiriéndose al tema de la Reforma Política, se declaró a favor de los cambios que se impulsan por este medio, producto del trabajo del gabinete del jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), lo mismo que la propuesta de Parlamento Abierto, próxima a presentarse y discutirse en el órgano legislativo de la capital que, según Godoy, “permitiría un control ciudadano sobre los legisladores”.

La exposición ideológica que acompañó el informe de labores también tocó un de los temas de mayor interés en el ámbito político de nuestros días, la Reforma Energética impulsada por el Gobierno Federal.

Dijo mantener una postura en pie de lucha para la construcción de un país más justo que respete los derechos del pueblo. Lo anterior incluye, según su perspectiva, un rechazo total a las Reformas presentadas por el Ejecutivo Federal, “por lo que me mantendré en la lucha en contra de las reformas impulsadas por Peña Nieto, que atentan contra los derechos de los trabajadores”.

La lucha, aseguró, la llevará a cabo desde la trinchera del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), con el levantamiento de una consulta ciudadana en Iztapalapa, refiriendo que es necesario “que le pregunten a los ciudadanos si están de acuerdo en entregar a intereses privados extranjeros y nacionales nuestros recursos petroleros”.