Miguel Ángel Mancera, hoy más que nunca, está en plena campaña electoral y los programas sociales plagados de asistencialismo son la bandera política por excelencia de ésta su administración. Centenares de familias que quedaron desamparadas desde el terremoto de 1985 han sido beneficiadas con créditos de renta y vivienda en un tiempo récord luego de 30 años en la indefensión.

En compañía de Raymundo Collins, titular del Instituto de Vivienda del Distrito Federal (GDF), el Ejecutivo local se vanaglorió por enésima vez de ser el responsable de 3 mil 24 “acciones de vivienda” para quienes más lo necesitan.

“Hoy estamos dando cuenta de otra acción de más en materia de vivienda, entregamos 3 mil 24 acciones de vivienda que representan un esfuerzo muy importante para el Gobierno ¿Qué es lo que nosotros instruimos?, primero, que los trámites se hicieran más rápido”, precisó.

Es así que, tan sólo por la instrucción de un jefe de Gobierno, los problemas de vivienda de miles de personas pueden ser solucionados tras décadas de burocracia y clientelismo electoral. 

“La instrucción que tiene el director general es ahora agilizar estos mecanismos con el Registro Público de la Propiedad  sin mayores requisitos más que cumplir con los lineamientos básicos de Invi, sin intereses también y hasta en tres ocasiones se puede dar este apoyo del crédito”, abundó.

Una vez cubierta la antesala del discurso burocrático, enunció lo propio para los beneficiarios que hicieron las veces de su entregado público en la explanada de la delegación Venustiano Carranza al que informó que “algunos de los créditos que acabamos de entregar son por más de 112 mil o 120 mil pesos”.

A lo largo de su administración, Mancera Espinosa ha presumido siempre una preferencia por los sectores específicos y según él vulnerables como lo son los niños, mujeres embarazadas, madres solteras y, sobre todo adultos mayores. Especialmente, éste último sector de la población es el que se ha visto mayormente beneficiado de lo que el titular del Ejecutivo local llama la Capital Social al grado de recordar a Andrés Manuel López Obrador como un luchador social ejemplar por su labor tan criticada con los adultos mayores.

Pese a ello, no dudó en evidenciar la contradicción evidente del discurso oficial al sentenciar que “aquí la Ciudad de México está demostrando que se ayuda parejo, que no estamos buscando beneficiar a sectores en específico. Sí tomamos en cuenta a quienes más lo necesitan, ahí tiene que ser así, así es como se tiene que realizar”.