Luis Alberto Alonso   @ikaro_46

No cabe dudad de que esta VII Legislatura es la más plural de todas las que han tenido lugar en la reciente historia de la democracia en la capital del país. Pero no precisamente por las mentes brillantes que aportan al debate desde perspectivas sociopolíticas o técnicas, sino por los grandes diputados fans del cosplay cultural, como la perredista Elizabeth Mateos, quien pareciera una acérrima seguidora de Paquita la del Barrio. ¿Me están oyendo, inútiles?

Fiel a su costumbre, por ejemplo, el ex delegado de Miguel Hidalgo y hoy hipster honorario de Donceles y Allende, Víctor Hugo, quien fácilmente recuerda al personaje “queda mal” de cualquier película mexicana de antaño. Y es que es taaaaan responsable, que siempre que extiende invitaciones a conferencias o recorridos técnicos, los reporteros de la fuente y hasta los jefes de éstos, aguardan su decisión de asistir ante la inminente posibilidad de que éste cancele sin dar explicación alguna.

Con representantes floridos de Xochimilco, Tabasco y hasta del mismísimo estado de Sonora, la Asamblea Legislativa es más bien una Torre de Babel donde el lenguaje deviene en un burdo intento de denostar al de enfrente o quedar bien con Miguel Ángel Mancera, quien parece, no sabe defenderse solo.

Para colmo, como el feminismo –tómelo usted como feminazismo- se alza como uno de los últimos gritos de la moda en el Tren del Mame, los diputados perredistas no se podían quedar atrás en conjunción con el que, dicen, es el “abogado de la ciudad”, Manuel Granados.

Aunque éste presenta datos a nivel nacional para argumentar un gran problema de abuso legal en contra de menores de edad por obligárseles a casar y, por tanto, sin un panorama claro sobre la situación que impera en la capital del país, los perredistas le aplauden. Y ya introducidos en materia, anuncian una iniciativa de reforma para hacerle la vida más pesada a los padres incumplidos.

¿Tiene esto algo de malo? Por supuesto que no, pero sí el utilizar el escaparate institucional para rencillas de carácter político y personal.

Precisamente fue Elizabeth Materos, ex delegada de Iztacalco, quien sacó a relucir el cobre, fiel a su costumbre, cada vez que el argumento se puede aplicar a un fiel obradorista que se interponga en su camino, sea de manera directa o indirecta.

Ejemplos de esta conducta han sido “la carrera de las curules” que Mateos y su compañero de bancada, Janet Hernández, emprendieron armadas con sus tacones deportivos en plena Sesión contra Citlalli Hernández para frenar un punto de acuerdo en contra de su esposo, hoy delegado, así como las supuestas críticas  que emitió contra el jefe delegacional de Azcapotzalco, Pablo Moctezuma.

Pero la tarde de este martes, Mateos se lució como nunca: probablemente bajo los influjos de las letras propias de la mujer luchona expresadas por Paquita la del Barrio en contra del falocentrismo opresor espetó que las penas aumentarán contra los padres morosos “si eres un incumplido con tus hijos… ¿Me escuchas, Martí Batres?”.

Para la mala suerte de la diputada, esta vez el mensaje se pronunció fuerte y claro ante micrófonos en una conferencia de prensa que contó con la presencia de Granados y Leonel Luna, quien parece uno de esos padres modernos que dejan a su prole a su suerte esperando que aprendan de sus errores…