Luis Alberto Alonso @ikaro_46
Gran descontento se vive en los tres partidos políticos más importantes del país. A las salidas esperadas e inesperadas de diversos actores y funcionarios del PAN y el PRD, se ha sumado de manera oficial la renuncia al PRI de Alejandra del Río, quien participara como precandidata por la delegación Cuauhtémoc y abandonara sus pretensiones por los que calificó como contradictorio.
Del Río Ávila, quien se uniera como militante al Revolucionario Institucional hace 10 años y participara como parte de los cuadros políticos del partido desde el 2010, se dijo decepcionada de que la agrupación política que iniciara la lucha por los derechos de las mujeres solapara delitos como los ejercidos por Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre.
Cabe recordar que, aunque no se ha demostrado de manera contundente alguna conducta ilícita por parte del expresidente del PRI en el Distrito Federal, la fama que lo acompaña desde su pronta carrera política genera suspicacias incluso al interior del tricolor. Por lo pronto, las investigaciones por una supuesta red de trata de personas no han concluido en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJ-DF).
“Dudo que se llegue a hace justicia en este caso. Muchas mujeres fueron afectadas, y mujeres del partido también”, afirmó en conferencia la ahora candidata por Movimiento Ciudadano.
En este sentido, cabe recordar que tras la imputación del proceso de selección a la candidatura delegacional por Cuauhtémoc presentada por Alejandra del Río, el Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF) emitió un fallo por el que ordena al partido a reponer el procese de selección.
No obstante, señaló que “el fallo del TEDF responde a un momento mediático y aunque ordenaran al PRI responder por los agravios, no ordenaron revisar la apelación sino que lo erigieron como autoridad jurisdiccional”.
Por esta razón, el caso ya ha sido llevado ante el Tribunal Federal. No obstante, a pesar de que el fallo del órgano colegiado pudiera ser emitido en su favor, la ahora candidata ciudadana afirma que el resultado como tal ya no representa la mayor importancia sino que el objetivo ha devenido en “sentar un precedente como candidata ciudadana, por el Distrito al que busco representar así como por dignidad”
“Los militantes que defendíamos nuestros estatutos y que nos creíamos protegidos por una Comisión de Justicia Partidaria -que es sólo un órgano encargado de negar recursos e impugnaciones por sistema- caímos en cuenta de que al PRI no le interesaban las propuestas nuevas, o los perfiles honestos y privilegiaban tanto al equipo de Cuauhtémoc Gutiérrez, como a candidatos con antecedentes legales, líderes del comercio informal, sin votos reales, y cuyos apoyos fueron las prebendas y las compras de influencia”, sentenció de manera tajante.
Precisamente, comentó que el ambiente enrarecido que se vive en las grandes cúpulas partidistas –PRI, PAN y PRD- no abona en pro de nuevos proyectos que coadyuven a las caras nuevas de la política mexicana. Así, sentenció que “las jugadas partidistas me tienen cansada” en referencia a las candidaturas locales plagadas de familiares y personajes afines a Gutiérrez de la Torre.
Ante este panorama, manifestó que le fue difícil encontrar una estructura política que le brindara la confianza para plantear desde su trinchera proyectos que aporten a un sistema político urgido de reformas, como lo es el del Distrito Federal.
Seguido de estas declaratorias, anunció su registro como candidata a diputada de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal por el Distrito XIII bajo el cobijo de Movimiento Ciudadano.
En compañía de los dirigentes locales del llamado partido naranja, ambas partes coincidieron en que las propuestas que han puesto sobre la mesa encuentran gran concordancia, por lo que esta alianza no representa un acto de “chapulineo” sino el apoyo mutuo en una agenda político-social. Sin embargo, los dirigentes de Movimiento Ciudadano sí dejaron claro que desde hacía tiempo habían estado en busca de Alejandra del Río, pues conocían su trabajo y propuestas, por lo que significa para ellos un activo importante sí para el partido, pero más para la Ciudad.
“Encontré las puertas de Movimiento Ciudadano abiertas a mi proyecto político, por lo que agradezco infinitamente al Lic. Dante Delgado, Presidente del Partido a nivel nacional y al Lic. Armando López Velarde Campa, Coordinador de la Comisión Operativa Estatal de Movimiento Ciudadano, quienes me hicieron ver que todos los ciudadanos que queremos ver cambios, aquellos que estamos hartos de las estructuras decrépitas, del tráfico de influencias y que deseamos poner trabajo y vocación por generar una transformación real en el estado actual de las cosas, tenemos una opción para sumar propuestas, esfuerzos, trabajo y corazón para luchar por un México mejor”, añadió.
Precisó que, aunque el registro de su candidatura es ya un hecho consumado, aún no puede decirse que está oficialmente separada de la militancia priísta que ha guardado por los últimos diez años. Y es que las operaciones administrativas de las oficinas cercanas al Monumento a Revolución se encuentran detenidas por las fechas presentes, por lo que en poco menos de dos semanas, su separación oficial del PRI se hará patente.
Además, aseguró que no por abandonar la militancia del partido que actualmente ostenta la presidencia de la República se debe inferir que marcara una línea de distanciamiento con sus viejos conocidos y colegas de énfasis político, sino todo lo contrario.
“Pienso regresar a platicar con mis amigos de la delegación y tenemos que ir paso a paso. Como candidata ciudadana voy a hacer un gran papel”, manifestó orgullosa Alejandra del Río.
Sin más, adelantó que la agenda legislativa que buscará impulsar se encuentra ya bien sustentada. Al igual que las voces críticas para con la estructura de Gutiérrez de la Torre y sus añadidos al interior del PRI, la ahora candidata naranja aseveró que la trata y explotación de personas con diversos fines y especialmente los sexuales no son una cosa menor en la Ciudad de México, como se quiere hacer creer. La situación, reiteró, es aún peor cuando se da cuenta de que existe un encubrimiento y hasta premiación para actores políticos influyentes que participan de estos delitos.
“Nuestro compromiso personal en la Asamblea será buscar adecuar las leyes existentes sobre la prevención, sanción y erradicación de los delitos de trata de personas y para la protección y asistencia a las víctimas de estos delitos que hoy en día resultan insuficientes para sancionar a los infractores, proporcionar asistencia, resarcir los daños a las víctimas y evitar el abuso de poder”, finalizó. |