Pide al Congreso de la CDMX impulsar leyes y políticas públicas a favor de la vivienda propia y digna, con interés social, así como la regulación de los costos de alquiler, “que las autoridades impidan que el precio no sea superior al 25% del salario promedio del trabajador”
La dirigente de la Asociación Civil Nueva Aztlán, Rita Cecilia Contreras Ocampo, afirmó que vivir en la Ciudad de México se ha convertido en un lujo para los capitalinos, debido a los altos precios de las rentas y para la compra de viviendas, lo cual ha propiciado que los ciudadanos busquen alternativas de casas-habitación en las entidades cercanas a la capital del país.
“Las renta de casas en la Ciudad sobrepasan el salario de los trabajadores, la mayoría de los inmuebles ofertados en la Ciudad de México son inaccesibles para las familias de ingresos medio”, aseveró.
La dirigente social señaló que luego de la pandemia de Covid 19, “muchos mexicanos perdieron su empleo o vieron reducido su salario, los costos del alquiler mantuvieron su valor, e incluso, aumentaron. Ante esta situación trabajadores o estudiantes capitalinos tuvieron que mudarse a las periferias al interior de la ciudad”, reforzó.
Consideró que los altos costos de las rentas reflejan la desigualdad en Ciudad; “hablar de la Ciudad de México es hablar de una de las metrópolis más grandes del mundo y una de las ciudades con mayor índice de desigualdad social, hecho que se puede sustentar tan solo con observar la diferencia de los costos de alquileres por Alcaldías”, refirió.
“Comparando los precios en fuentes como Vivanuncios e Inmuebles24, así como datos que otorga año con año el Instituto de Vivienda de la CDMX (INVI), se pude establecer que la mayoría de los promedios de alquiler rebasan los 10 mil pesos llegando incluso hasta los 90 mil, cifras elevadas si se toma en cuenta que el trabajador promedio mexicano recibe entre 6 mil y 8 mil pesos mensuales”, anotó.
Ante este fenómeno, Contreras Ocampo demandó la intervención del Congreso de la Ciudad de México para regular los costos de alquiler de la vivienda, sobre todo luego de que el gobierno tiene acuerdos con la empresa de hospedaje Airbnb para atraer a personas a vivir en colonias de alta plusvalía, lo cual incrementar el precio de las rentas.
“Los diputados que conforman la Comisión de Vivienda del Congreso de la Ciudad de México deberían estar preocupados por esta agenda que es prioritaria para los capitalinos y capitalinas. Deben impulsar leyes y políticas públicas a favor de la vivienda propia y digna, con interés social, así como la regulación de los costos de alquiler, que las autoridades impidan que el precio no sea superior al 25% del salario promedio del trabajador”, aseveró.
Dijo que los capitalinos “nos enfrentamos a un problema grave, debido a que no es sostenible para ninguna persona que la mayor parte del ingreso se destine a la renta, dejando a un lado otros rubros como la alimentación, la educación, la salud y la recreación, mismos que son fundamentales para el desarrollo integral de una persona”.
El Plan General de Desarrollo de la Ciudad de México, en el rubro de vivienda, debería estar diseñado para ayudar a las personas de escasos, bajos y medios recursos, y no a las inmobiliarias particulares para seguir enriqueciéndose”, abundó.
Rita Contreras opinó que la tierra donde se propone edificar desarrollos habitacionales debe ser para las mayorías desprotegidas y olvidadas y así garantizar, desde la Jefatura de Gobierno, la vivienda a las más de 20 mil solicitudes que se registran en el INVI.
Actualmente se vive un problema de segregación social en donde sólo el 10% de la población de la Ciudad de México puede permanecer en el Centro de la Ciudad, mientras que el resto del grueso poblacional tiene que volver a la casa de sus padres, vivir con más personas (Roomies) para compartir costos de alquiler o mudarse de estado”, insistió.
“Desde Nueva Aztlán alzo la voz a favor del desarrollo social con nuestro programa de vivienda #VivirBonito, creo que vivir bonito no debería de ser un lujo. Si una persona puede acceder a tener una vivienda propia no sólo resuelve una necesidad sino logra tener un proyecto de vida integral que le garantizara tener un desarrollo social pleno”, agregó. |