Luis Alberto Alonso @ikaro_46
Tras las protestas pacíficas de simpatizantes del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) que devinieron en actos de violencia en contra de elementos de seguridad, el jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Miguel Ángel Mancera, dijo rechazar cualquier situación violenta, aunque reiteró que es parte de la “efervescencia política”, por lo que se declaró listo para colaborar con las nuevas administraciones delegacionales.
Encabezados por el líder nacional de MORENA, Martí Batres, militantes y simpatizantes del partido fundado por Andrés Manuel López Obrador han llevado a cabo manifestaciones de diversa índole por lo que consideran un fraude electoral en lo que toca a los resultados de las delegaciones Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Magdalena Contreras.
La escalada de las manifestaciones ante la negativa de las autoridades electorales de satisfacer sus demandas y las acusaciones que atañen al Gobierno de Miguel Ángel Macera bajo el supuesto de haber desviado recursos para la coacción del voto en pro del PRD devinieron en el intento de quema de réplicas de urnas y boletas electorales a la entrada del Antiguo Palacio del Ayuntamiento.
Al ser cuestionado por el tema, Mancera Espinos desestimó las acusaciones bajo la sentencia de “no caer en la provocación de ningún grupo, llámese como se llame, del partido que fuere”.
Por el contrario, continuó, “el Gobierno de la Ciudad va a hablar con todos, nosotros tenemos ahora jefes delegacionales del PAN, del PRI, del PRD y de Morena y el Gobierno de la Ciudad tendrá que trabajar con todos; con todos y cada uno de ellos estaremos participando en la transición con la Contraloría y obviamente el diálogo está siempre abierto”. |