El dirigente del Movimiento Binacional por la Esperanza (MBE), René Bejarano Martínez, condenó las más de 2 millones de deportaciones de migrantes que viven en Estados Unidos e insistió en denunciar que el servilismo del gobierno de Peña Nieto con su homólogo estadounidense afecta a millones de compatriotas que viven de ese lado de la frontera.
Durante la Primera Reunión del MBE, efectuada en esta ciudad, centenares de voces demandaron detener las deportaciones y acabar con esta política del miedo que además,. violenta los derechos humanos de los migrantes.
Al reunirse con más de 500 dirigentes sociales, líderes de migrantes y asociaciones de profesionistas y braceros de diversas ciudades de Estados Unidos, Bejarano Martínez dijo que solo un gobierno de izquierda velará por los derechos de los migrantes. Por ello, se comprometió a que los legisladores afines a este Movimiento promuevan en el Congreso de la Unión espacios de diálogo con sus homólogos de Estados Unidos para atender con urgencia la situación que enfrentan los más de 6 millones de migrantes mexicanos y sus familias.
Reunidos en la Arena Deportiva de la Ciudad de Los Ángeles, California, hasta donde llegaron representantes de diversos estados de la República Mexicana, también asumió que promoverán políticas con enfoque regional y de respeto a la dignidad de las personas.
Dijo que empujará iniciativas encaminadas a que se concrete la credencialización de la población mexicana en el exterior e impulsar mecanismos más eficientes y seguros para la emisión del voto y garantizar la inclusión política de todas y todos los connacionales, más allá de nuestras fronteras porque los límites geográficos no deben separarnos.
Exigió al titular del Ejecutivo mexicano expresar una postura firme y de apoyo a los connacionales, a través de su red de consulados, porque en estos momentos de emergencia no caben las vacilaciones ni mucho menos la indiferencia ante un problema que puede convertirse en emergencia nacional.
Peña Nieto trata este problema de manera “marginal” porque no tiene interés en atenderlo. Y eso, agregó, lo demuestra ya que hasta la fecha no ha presentado el programa especial de migración que se enuncia en el Programa Nacional de Desarrollo 2013-2018.
A esta actitud poco patriótica se suma su política antiinmigrante con los flujos migratorios provenientes de los países hermanos de centro y Sudamérica, sin importar la suerte que corren miles de seres humanos que pasan por nuestro país en busca de mejores condiciones de vida.
Por su parte, la senadora Dolores Padierna acusó la falta de patriotismo del gobierno de Peña Nieto y de los legisladores del PRI y del PAN que están vendiendo el patrimonio de los mexicanos en cada una de las reformas estructurales que aprueban.
Informó a los migrantes los efectos de las reformas laboral, educativa y energéticas, que sólo generarán más hambre y miseria porque desmantelan el estado de bienestar y nos subordina, aún más, a una potencia extranjera.
Ejemplificó que la reforma energética generara divisas superiores a los 100 mil millones de dólares anuales que dicen no son suficientes para garantizar mejores condiciones de vida de todos los mexicanos.
Este despojo, anotó, nos obliga a defender nuestra soberanía económica y a seguir dando la lucha para dar marcha atrás a este modelo que genera hambre y miseria a nuestro país.
Por eso es necesario que desde la izquierda se cambien estos esquemas impuestos por la derecha, “porque somos sensibles a los problemas de los braseros, de los migrantes que vinieron a este país en busca de mejores condiciones de vida para sus familias”.
Defendemos los derechos de nuestros compatriotas porque somos parte de un proyecto liberador, justo, que busca mejorar las condicione de vida de los mexicanos, dijo.
Por su parte, los dirigentes de braseros, inmigrantes, trabajadores del campo y de asociaciones de profesionistas llamaron a la unidad para defender sus derechos humanos, porque no son ciudadanos de segunda.
En tanto, la diputada federal Lorenia Valles, aseguró que el MBE acompañará las acciones pacificas tendientes a evitar las deportaciones masivas, a través de redes de solidaridad para avanzar más y mejor porque los más de 5 mil niños que han sido separados de sus padres merecen crecen en un ambiente sano y seguro.
Por último, le recordó que el presidente de Estados Unidos, Barak Obama tiene una deuda con la comunidad migrante hispana a quien ofreció una reforma migratoria justa, que hasta la fecha no ha cumplido. |