“Es importante mostrar como fotógrafo la gran riqueza cultural que tiene este país, que la puedan contemplar en otros lugares, que los mismos mexicanos podamos viajar a través de las fotografías y si no poder ir a los lugares, sí poder conocerlos a través de las imágenes”, comentó Javier Hinojosa sobre su exposición Guardianes del México Antiguo.
La muestra se inaugurará mañana 30 de julio en el Museo Archivo de la Fotografía, en el marco de la Noche de Museos que organiza la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, y permanecerá hasta la primera semana de octubre.
En el recorrido por la exhibición, que ofreció a los medios de comunicación, Hinojosa explicó que se trata de alrededor de 110 fotografías originales en blanco y negro, capturadas entre 1993 y 2013, de al menos 50 zonas arqueológicas de México, que van desde la zona maya en el Sureste mexicano, hasta las del Norte como Paquimé y Nuevo Casas Grandes, por mencionar algunas.
Y es que, dijo, aunque ya antes había capturado imágenes de zonas arqueológicas, en 1998 empezó a trabajar en el registro fotográfico de pintura mural prehispánica con la doctora Beatriz de la Fuente, del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, y a partir de entonces descubrió que era una fuente de inspiración que le interesó mucho.
En aquel momento, indicó, cubría la zona maya, por lo que en 2001 presentó la primera versión de la exposición Mayas, espacios de la memoria, que dio origen a un libro del mismo nombre.
Para dicha exposición, utilizó la técnica platinum palladium, que data del siglo XIX y que consiste en hacer un negativo al tamaño del original final porque las impresiones se hacen por contacto. Es por ello, que cada foto tomada con esta técnica es considerada como un original.
Esto, luego de que en 1996 recibió un apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca) para hacer la investigación sobre procesos negativos digitales dedicados a procesos antiguos.
Reveló que eligió utilizar esta técnica porque su riqueza tonal se complementaban muy bien las sombras arqueológicas, y también a manera de homenaje a los trabajos titánicos que hacían los primeros exploradores del siglo XIX visitando muchos de estos lugares en circunstancias totalmente distintas y complejas, como el traslado de sus equipos hasta la zona, el cual que podía llevar días.
La exposición Mayas, espacios de la memoria viajó por los cinco continentes; después de esa itinerancia regresó a México y fue entonces que Hinojosa empezó a integrar otros lugares que no fueran mayas, para lo cual, inició con un viaje por casi toda la República Mexicana, aunque reconoció que es imposible tener un registro de todos los sitios arqueológicos que tiene nuestro país.
A esta primera muestra, se sumó otra más que se llamó Guardianes del tiempo, que no estaba tan focalizada en la zona maya, sino que pretendía ser una muestra representativa de las más importantes zonas del país.
Así, Guardianes del México Antiguo viene siendo un compendio de exposiciones, para hacer una muestra más integral y más generosa del trabajo que Hinojosa ha hecho durante más de dos décadas.
Además de platinum palladium, se exhiben fotografías hechas con las técnicas digitales, de inyección de tinta o piezografías, que eran impresas con máquinas de cuatro tonos de negros y grises.
“Hasta la fecha continúo este trabajo profesional, cada que se abre una nueva zona arqueológica o que puedo regresar a un lugar haciendo este registro… Yo creo que quizá sea la búsqueda de un artista, rascar entre nuestras propias raíces, digamos hacer arqueología del espíritu buscando otras cosas, en este caso en la naturaleza”, manifestó Hinojosa.
Y es que el fotógrafo logró capturar imágenes de zonas que no están abiertas al público e incluso llegó a estar en el momento en que se abrió la Reina Roja en Palenque, hecho que calificó como “una experiencia siempre sorprendente”.
Por lo anterior, reconoció que su trabajo, que ha partido de viajes personajes, es también producto del contacto con arqueólogos y personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que con sus investigaciones y sus experiencias han alimentado y complementado “la visión de una búsqueda artística”.
Hinojosa detalló que realiza fotografía en blanco y negro porque considera que le permite hacer una interpretación más íntima y más poética de la realidad, así como una forma más directa de expresión.
A su vez, el director del Museo Archivo de la Fotografía, Vicente Guijosa, resaltó que además del valor arqueológico de las imágenes captadas por Hinojosa, éstas poseen un gran valor artístico
“Independientemente de hacer un trabajo minucioso de todas las zonas arqueológicas, se van a encontrar la postura, la posición de los fotógrafos de arqueología y la manera también de ver de un artista que le toca estar en esos maravillosos lugares con ese ojo”, afirmó Guijosa.
La exposición fotográfica Guardianes del México Antiguo será inaugurada el 30 de julio, a las20:00 horas, y permanecerá hasta octubre en el Museo Archivo de la Fotografía (República de Guatemala 34, Centro Histórico). Entrada libre. |